martes, 3 de marzo de 2009

03032009

Es tanta la intensidad de los sentimientos/ que de las yemas solo pueden ser luces las que nazcan/ la luz no se marchita se expande y se emana/ después de ver la ruina del hombre sobre la tierra/ las chabolas de la miseria/ los niños que enarbolan sus débiles cuerpos en busca de un suspiro/ de una madre que ya nunca llega porque ha volado a otros universos/ rota y desgañitada de tanto querer a sus hijos/ y no saber como protegerlos de la impiedad de muchos hombres/. Es tanta la maldad que habita en el mundo/ que ya no sé que puede pasar sin el necesario y desinteresado interceder de muchos hombres santos/ santos que nunca estarán en los altares porque son silenciosos/ caminan con la vista puesta en las necesidades de los mas débiles/ y se compadecen de nuestras penurias con la sonrisa amarga de lo que no pueden cambiar/ aunque si quisieran./

Ven el mundo tal cual es/no a través del deformado mundo de los ricos televisivos/ni de las series de personas que sólo saben hablar de sus vidas aburridas/ sin nada mas que hacer que buscar su aparente felicidad/ una felicidad irreal,/ impuesta por su entorno/ y sometida a toda clase de imposiciones sociales/ y todo tipo recelos/ ¿que queda del mundo que ….. quiso para los hombres al hablar?/que queda para los hombres del mundo/ que los hombres sabios se esforzaron en enseñar/ y hasta sus vidas dieron para verlo germinar/ ¿que queda…?, poco, poco, muy poco…, pero mientras un solo niño necesite el hálito de la sonrisa y de la vida en familia/ este mundo es posible que siga dando vueltas, y al mismo tiempo los peores seres seguirán dándose el festín de su vanidad, de su egoísmo, de su vida de lujos a costa de los demás.

Las naciones se encaminan al desastre/ sino se cambia la forma de mirar y de vivir, /y solo los niños se salvarán de la auto destrucción que la humanidad/ se está , poco a poco preparando para su funeral,/ porque fundará la ciudad de los niños/ donde tanta barbarie no les alcance,/ donde los querubines les enseñen a hablar la verdad y el amor demostrar, /el abrazo fraterno dar y la caridad practicar para con los demás sin mas/ sin nada mas que sentirse bien /y felices de poder ser y sentir al amor de verdad,/ esa es la única felicidad, el amor , el amar, la verdad de la vida,/ de su felicidad, eso que tanto buscamos/ y que tanto nos quita el sueño/ porque nunca encontramos la razón de nuestra infelicidad/, simplemente es darlo todo por los demás, todo y todos por todos,/ así el mundo sería un jardín de verdad/ y la utopía de los antiguos profetas se haría realidad.

Busquemos pues un camino/ que nos una en el corazón/ y que nunca mas nos vuelva separar /de la verdadera felicidad del amor/ en paz y amistad fraternal.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

i know i have to go

hay un camino

un abrazo

Lucía dijo...

Leer la entrada es como volver a sentir la esencia del musical A.
Una gran verdad la que sale por las yemas de tus dedos y dejas impresa.
Sólo el camino del corazón, en paz y amor tienen la respuesta...
Un beso.

mj dijo...

No hay que perder la esperanza.
Me encanta Cat Steven, es uno de mis favoritos, me ha gustado escucharlo, gracias
Un abrazo
mj

Carmen Conde Sedemiuqse dijo...

almas unidas
besos y amor
je

Carver dijo...

Si Santi, eso espero.

saludos

Carver dijo...

Gracias Lucía, creo que te encanto el musical, ya me contarás, je.

besos

Carver dijo...

También a mi me trae buenos recuerdos, y en estos tiempos es como un adelantado a su tiempo.

besos

Carver dijo...

Almas y corazones Sede.

besos y amor je