Juan 8, 12-20
En aquel tiempo dijo Jesús a los judíos: «Yo soy
la luz del mundo; el que me siga no caminará en la oscuridad, sino que tendrá
la luz de la vida».
Una vez más ha llegado la navidad y dentro de poco también
será el día de los Reyes magos.
Todavía alumbran sus camellos el rescoldo de las brasas de
nochebuena e iluminan los corazones puros de los niños con la ilusión de nuevas
esperanzas.
Aunque parezca tenue, el camino ya está dispuesto, la Luz ya vino y La
Vida se nos ha dado.
Quien quiera abrazar la Luz solo ha de caminar Su camino y llegar a las
puertas de la Vida.